El Ayuntamiento de Logroño ha iniciado los trámites para rehabilitar la cubierta del Mercado de San Blas. Para ello, la Junta de Gobierno local aprobó ayer el expediente de contratación de las obras, que tienen un presupuesto de 225.000 euros. Tal y como detalló el portavoz municipal, Vicente Urquía, los trabajos tendrán un plazo de ejecución de dos meses, aunque no se iniciarán inmediatamente, ya que todavía tienen que concurrir las empresas interesadas y el Ayuntamiento deberá adjudicarlos tras analizar las ofertas.
El ayuntamiento calcula que el Mercado de Abastos podrá estrenar una nueva cubierta a finales de año.
Esta iniciativa forma parte, según explicó el edil, de una serie de decisiones que el equipo de Gobierno local ha tomado en este año para «mejorar este edificio emblemático».
En concreto, recordó que «ya se han arreglados las puertas», que ahora son automáticas, «y se han instalado ventanas en la segunda planta», ya que, al carecer de ellas, «en verano entraba todo el calor y en invierno todo el frío».
Estas intervenciones, junto a las realizadas con motivo de la celebración el pasado año de ‘La Rioja Tierra Abierta’, han supuesto una gran mejora en la histórica construcción, según se recoge en el planteamiento municipal.
El edificio tiene una calificación de segundo orden en la Ordenanza de Edificios de Interés, lo que limita las acciones llevadas a cabo en él a las tendentes a su conservación, consolidación, eliminación de añadidos y acondicionamiento para su correcta utilización.
En este caso, el objetivo de la intervención es sustituir la cubierta compuesta por placas de fibrocemento. Debido a que es un residuo peligroso por su alto contenido en amianto, el Consistorio se ha visto obligado a elaborar un plan de gestión de residuos específico dentro del proyecto.
Las placas de fibrocemento serán sustituidas por una chapa de acero lacado con acabado tipo cobre de casi un milímetro de espesor, incluyendo un aislamiento térmico de poliestireno extruído de cinco centímetros de grosor.
El proyecto incluye también la sustitución de las bajantes, que se dotarán con cubrebajantes elaborados con cobre de fundición, teniendo en cuenta los entronques del canalón y de los colectores de techo de planta baja.
La solución adoptada, tal y como se recoge en el proyecto elaborado desde el Ayuntamiento, entraña una propuesta «con carácter permanente» y, dada la introducción del aislamiento sugerido, «se consigue un alto confort de cara al uso interior del Mercado».